En el campo pedagógico, Cabrera y Pesantez (2015) definen: Las estrategias son
todos los procedimientos que se activan para adquirir una destreza y por eso deben
estar bien organizadas por el docente para alcanzar su objetivo, es decir, ayudar
al estudiante a aprender en forma significativa y autónoma los distintos contenidos
y destrezas. (p.46)
En otras palabras, las estrategias representan una programación de actividades
que revisten las características de un plan, que llevado al ámbito de los
aprendizajes permiten la elección, coordinación y aplicación de las habilidades
que poseen los estudiantes, mediante la ejecución de procedimientos orientados
a la práctica para la consecución de un aprendizaje significativo.
Sobre este aspecto dentro del proceso de enseñanza a estudiantes con bajo
rendimiento académico, se debe considerar las estrategias didácticas a las cuales
el docente puede tener acceso para satisfacer las necesidades cognitivas, físicas y
afectivas y que se encuentran en el modelo de inclusión educativa.
Esto se traduce, a una pedagogía que orienta la mediación de los aprendizajes y
que favorezca la formación integral. En este sentido, la práctica escolar se
convierte, muchas veces en una rutina de actividades; más allá de implantar una
rutina educativa, los docentes son responsables de efectuar una doble línea de
acción, por una parte tener una gama de estrategias aplicables a situaciones,
competencias y estudiantes específicos y, por otra, asegurar cierta variedad a su
praxis docente, ya sea, por el simple hecho de no seguir siempre una pauta
prefijada o por el interés de aventurar cierta innovación en sus acciones.
Dentro de este marco, Avanzini (2017), define la estrategia como “el conjunto de
procedimientos, apoyados en técnicas de enseñanza, que tienen por objeto llevar
a buen término la acción didáctica, es decir, alcanzar los objetivos de aprendizaje”
(p.2), por ello, la estrategia hace alusión a la planificación que realiza el docente
durante el proceso de enseñanza y aprendizaje, llevando implícito actividades,
recursos, técnicas, métodos entre otros aspectos a considerar para llegar a los
objetivos programados.
De acuerdo con Camilloni (2018), las estrategias didácticas son "las formas en que
el docente crea una situación que permita al alumno desarrollar la actividad de
aprendizaje" (p.32), es decir, hacer referencia a una acción planeada
especialmente para una situación concreta. Al respecto, Fairstein y Gyssels (2018),
indican que “una estrategia didáctica puede planificarse para una clase o una serie